El 31 de diciembre, a las 16.30 h., dio comienzo la solemne ceremonia de apertura del Año Santo jubilar Compostelano 2021. Esta vez, debido a la pandemia, los aforos se vieron muy reducidos, de tal manera que en el interior de la Catedral sólo pudieron participar en la Eucaristía150 fieles. En la nave central de la Catedral, se situaron las autoridades y representantes de las asociaciones del Camino de Santiago. En las naves laterales, había representación de las diferentes Delegaciones Diocesanas, de Cáritas, Vida Consagrada, Seminario Mayor, Oficina del Peregrino y Archicofradía del Apóstol Santiago. Los sacerdotes que pudieron concelebrar no superaron la cifra de 40. En la Plaza de la Quintana, solamente pudieron estar presentes 250 personas.
Acompañaron al Sr. Arzobispo, que presidió esta celebración: Mons. D. Antonio María Rouco Varela, Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid, Mons. D. Bernardito Cleopas Auza, Nuncio Apostólico de Su Santidad en España; Mons. D. Francisco Pérez González, Arzobispo de Pamplona y Tudela; Mons. D. Jesús Sanz Montes, Arzobispo de Oviedo; Mons. D. Santiago Agrelo Martínez, Arzobispo emérito de Tánger; Mons. D. Luís Quinteiro Fiuza, Obispo de Tui-Vigo; Mons. D. Alfonso Carrasco Rouco, Obispo de Lugo; Mons. D. José Leonardo Lemos Montanet, Obispo de Ourense; Mons. D. Jesús Fernández González, Obispo de Astorga; Mons. D. Luis Ángel de las Heras Berzal, CMF, Obispo de León y el Ilmo. Sr. Don Antonio José Valín Valdés, Administrador Diocesano de Mondoñedo-Ferrol. Estaba presente el Cabildo en pleno, presididos por el Sr. Deán. También, asistieron, los Sres. Vicarios Episcopales, Rectores del Seminario Mayor y Menor, el Arcipreste del Xiro de la Ciudad, los Sres. Vicarios Generales de Oviedo y Lugo, el Vicario en Galicia de la Prelatura del Opus Dei, el P. Provincial de los Franciscanos y el Superior Delegado de Europa de los Siervos de la Caridad (Guanelianos).
Las autoridades, que siguieron la ceremonia de apertura desde la Plaza de la Quintana, fueron solamente el Delegado de S. M. el Rey, D. Alberto Núñez Feijóo, Presidente de la Xunta; la Sra. Ministra de Trabajo, D.ª Yolanda Díaz Pérez (que sólo estuvo presente en la Plaza de la Quintana); el Sr. Presidente del Parlamento de Galicia, D. Miguel Ángel Santalices Vieira, el Sr. Delegado del Gobierno de España en Galicia, D. Francisco Javier Losada de Aspiazu; el Sr. Alcalde de la ciudad de Santiago de Compostela, D. Xosé A. Sánchez Bugallo, y el General Jefe de la Fuerza Logística, Sr. D. Juan Francisco Arrazola Martínez.
Una vez que la procesión litúrgica llegó a la Plaza la Quintana, se procedió al rito de Apertura que comenzó con el saludo del Sr. Arzobispo. Después de la lectura del Evangelio, el Nuncio de Su Santidad leyó el mensaje que el Papa Francisco había enviado para esta ocasión. Finalizado el canto del Veni Creátor Spiritus, el Sr. Arzobispo se acercó a la Puerta Santa, y después de golpear tres veces la Puerta con el martillo, procedió a su apertura, momento en el que empezaron a repenicar las campanas de la Catedral, se encendió la linterna de la Torre de la Berenguela, sonaron las trompetas y las bombas de palenque lo anunciaron a toda la Ciudad. Abierta la Puerta, el Sr. Arzobispo se arrodilló sosteniendo la cruz procesional en sus manos. Lavadas las jambas con agua bendita y adornada con flores, se entonó el Te Deum y el Sr. Arzobispo atravesó la Puerta en primer lugar, seguido de los Sres. Obispos, sacerdotes y autoridades. La procesión recorrió las naves de la Catedral y al llegar al Altar Mayor comenzó la Eucaristía de la Solemnidad Santa María Madre de Dios. Después de la oración de postcomunión, voló el Botafumeiro, mientras se entonaba el himno al Apóstol Santiago.
Antes de la bendición final, impartida por el Sr. Arzobispo, el Nuncio de Su Santidad volvió a tomar la palabra para dar lectura al decreto por el que se alarga el Año Santo Jubilar Compostelano hasta finales del año 2022.